Un nuevo año acaba de empezar así que dejo a un lado los rollos políticos, la crisis y la mala leche para haceros un regalo, que podréis ver en los dos blogs.
Bueno, es un poco presuntuoso decir que el regalo es mío cuando sólo soy el que pone el enlace...
Julian Assange se ha hecho famoso porque a través de su página ha publicado en los últimos años cientos de miles de documentos secretos. Algunos de ellos los puedes ver en el enlace que he puesto antes.
Esto ha caldeado los ánimos yanquis que le han llegado a calificar de terrorista.
También se ha hecho famoso porque ha sido acusado de violación y acoso sexual. Algo que muchos atribuyen a las presiones de un lado oscuro que está hartándose de este señor.
Hasta aquí los hechos que ya veremos en que desembocan. De momento pongo esta entrevista que le hicieron este verano y que me parece bastante interesante.
Por cierto... Aunque dé para otra entrada en el blog... ¿por qué no salen en Wikileaks papeles sobre Israel?... Si alguien lo sabe que me lo diga...
Ahora sí, aquí está la entrevista. (Por cierto, puedes elegir el idioma de los subtitulos si no dominas el inglés).
La verdad, no sé porque voy a hablar de Salvador Sostres. Perfecto reflejo de la indigencia moral e intelectual como él mismo dice en su blog. "Estic acostumat a servir de mirall de tanta indigència moral i intel·lectual." Un individuo que sus mayores méritos es provocar de la forma más......... posible. Ejemplos son innumerables: "...Parlar espanyol és de pobres. I ja que som allà, dic també que és de gàngsters, amb aquella insòlita col·lecció de dictadors i mafiosos..."
Sostres publicó en su página web (www.salvadorsostres.com) los días 20 y 24 de abril de 2006 dos artículos en los que denunciaba que los cambios que por esas fechas efectuó Maragall en el gobierno autonómico respondían "más a una euforia etílica que al sentido común" e instaba al presidente a responder ante la ciudadanía si era o había sido "alcohólico" o si sufría "algún trastorno bipolar".
Y la última: esa conversación, según él privada, que se produce en una televisión pública y con niños delante....
Otro SUPER MACHO DE DERECHAS. Por cierto... el apoyo del otro SUPER MACHO riéndose y casi vitoreándole es también significativo.
Que para ser fascista había que ser muy macho tampoco tenía dudas. Siempre han demostrado una alta homofobia y una gran inclinación a la discriminación de las mujeres por el echo de serlo. Además de ser propensos a usar los genitales masculinos para hacer las cosas.
Pero ahora dos cráneos privilegiados neoconservadores han demostrado que esto es cierto:
"En Tokio, un día, me topé con unas lolitas, pero no eran unas lolitas cualesquiera, sino de esas que se visten como zorritas, con los labios pintados, carmín, rímel, tacones, minifalda"... "Tendrían unos trece años (...). Subí con ellas y las muy putas se pusieron a turnarse. Mientras una se iba al váter, la otra se me trajinaba"... "El crimen ha prescrito, así que puedo contarlo, aparte de que las delincuentes eran ellas y no yo"
La ficción: Un crucero naufraga en el Mediterráneo y mueren trescientas personas de diferentes nacionalidades: franceses, españoles, italianos, británicos,… ¿Qué repercusión tendría en los medios de comunicación? Mucha. Portadas de periódicos y revistas, informativos de televisión y radio centrados en la catástrofe, especiales informativos,… La realidad: Dos cayucos naufragan en el Mediterráneo y mueren trescientas personas de diferentes nacionalidades. ¿Qué repercusión tiene en los medios de comunicación? Escasa. Algunos titulares en los periódicos y algunas reseñas en los informativos de televisión y radio y para de contar.
¿Por qué?... Una razón es básica en las formas de actuar últimamente los medios de comunicación. Estas víctimas dan poco juego. No tendrán imágenes de cuerpos destrozados, ni podrán entrevistar a las pocas víctimas, ni podrán buscar a los familiares, ni habrá entierros en los que sacar los primeros planos de las caras destrozadas de los familiares,… En definitiva no habrá carnaza de la que puedan comer estos carroñeros que se han instalado en los grandes medios de comunicación de todo el mundo.
La otra razón es básica también. Los califican como inmigrantes irregulares o ilegales. Pero estos muertos eran sólo personas y no emigrantes y mucho menos irregulares, como se empeñan en etiquetarlos los medios de comunicación. Para ser emigrante primero tienes que haber emigrado y ellos no lo consiguieron. Para ser ilegal tienes que haber cometido un acto en contra de la ley. Ellos no vulneraron ley ninguna. Más leyes y derechos se habían vulnerado en contra de ellos sin lugar a dudas.
Es curioso que ahora que se tiende a ser tan cuidadoso con el lenguaje para que sea políticamente correcto se digan cosas de este estilo. Desde aquí les propongo un titular escandaloso y sensacionalista, que son los que les gustan:
"Mueren trescientos esclavos tras naufragar su barcaza"
¿Acaso estas personas, presuntamente, no venían a Europa para trabajar de manera irregular con mafiosos que no les reconocen ningún derecho y les explotan privándoles de todo derecho? ¿No es esto esclavitud? Entonces este titular es más cercano a la realidad.
Tal día como hoy, hace setenta años, esta ciudad en la que nos ha tocado vivir, se convirtió en involuntaria protagonista y pasó a la historia dando una de las mejores noticias que se podía dar:
Después de prolongar hasta la extenuación, hasta lograr la aniquilación casi total de los defensores del legítimo gobierno, los golpistas, encabezados por Francisco Franco Bahamonde, pusieron fin a la guerra. La guerra más salvaje y cruenta que ha conocido este país y cuyos efectos se siguen notando y a la que nadie, aun, ha puesto ningún reparo.
El país, en estado de shock, no dio ninguna muestra de alegría para celebrar la noticia del fin de la guerra. Estos “amantes de la nación española” la habían reducido a cenizas. Pisoteando, humillando, destrozando los sueños, las conquistas y las ilusiones de una de las democracias más avanzadas y progresistas de todo el mundo.
Por un deseo de destrucción total del “enemigo”: De hecho no aceptaron nunca la firma de una tregua ni de un final de guerra pactado como en reiteradas ocasiones solicitaron los representantes del gobierno democrático. Tampoco el general Franco, que encabezaba las tropas golpistas, cedió a los deseos de Mola que quería ir contra Madrid, una vez tomadas algunas ciudades del sur de España. Ordenó que se desviasen a Toledo para conseguir tomar esta ciudad. Esto provocó que a Madrid consiguiesen llegar refuerzos de toda España y después fue más cruenta la batalla para conseguir que cayera. Sin hablar de las masacres “ejemplificantes” como el bombardeo de Guernica.
Por una mala estrategia: No sé si son muy fiables los historiadores que defienden que Franco era un pésimo estratega aunque algunas de sus decisiones sí que parecen darles la razón. Casos como el de la toma de Madrid que habría sido mucho más fácil o la Batalla del Ebro son bastante parecen que les darían la razón.
Aun así la represión no terminó con esta declaración del final de la guerra sino que se incrementó hasta niveles imposibles de soportar que sólo se frenaron cuando el dictador se dio cuenta de que sus aliados perdían la II Guerra Mundial y esto le podría traer problemas. Como dice Jorge Martínez Reverte en esta entrevista en A vivir que son dos días:
Aun así, setenta años después del fin de la guerra más de treinta años de democracia no han conseguido restañar las heridas abiertas que siguieron sangrando durante los cuarenta años de dictadura y se intentaron meter debajo de la alfombra durante la transición. Nadie se ha atrevido aun, sino de una forma muy tímida, a cerrarla definitivamente denunciando el golpe de estado, las masacres cometidas y dando un enterramiento digno a las víctimas. Ahora que tanto reclaman el enterramiento digno de otras.
Cada día estoy más convencido de que en España tenemos políticos que superan todos los calificativos posibles. Personas, en esta y otras profesiones, que por diferentes causas nunca lograrán mayores éxitos en su vida. Éxitos que si miramos su valía se merecen, sin lugar a dudas. Una de éstas es Mariano Rajoy un político singular que, si alguien no lo remedia, pasará a la historia como el segundón. Qué nadie se equivoque. No estoy pidiendo que sea presidente del gobierno. En este caso gobernaría el Partido Popular y... ¡buf!, prefiero no pensarlo, menuda pesadilla. Desde aquí propongo lo siguiente: Decretar la III República y que el presidente del país sea este político singular. Su labor sería la misma que la que tiene nuestro actual monarca: un "florero" al que llevan a un lado para un acto de inauguración o de celebración, que descubre una placa conmemorativa o que hace discursos y declaraciones puntuales. La ventaja que tendríamos es que podríamos elegir y cambiar de "florero" cada cierto número de años. Además en esto de las declaraciones o discursos Rajoy es un experto. Recordemos lo que dijo sobre el cambio climático, sobre el coñazo del desfile de las Fuerzas Armadas o la "genial" intervención sobre las negociaciones del gobierno, presidido por Zapatero, con E.T.A. Una de sus últimas genialidades es su contestación en una entrevista de Radio Nacional a la pregunta de si conocía a Francisco Correa:
La entrevista es un poco larga pero el estracto lo han sacado los de Anda Ya y le han dedicado una canción: http://www.typepad.com/services/trackback/6a00d83451cca569e2011279658aaa28a4